Te prometí….
Te prometí tantas veces,
ayudarte a olvidarla.
Pero hoy no se me acaba
el viboreo por dentro,
de saber futuro incierto,
de pensarte solo mìo
cuando lleno tus vacìos
y tus notas musicales.
Pero también prometí
ser tu sable,
tu crespón,
tus piernas y el cinturón
que te sostiene bombachas.
Mas, si las suelto
se deshilachan
se tumban con vos al suelo.
Y si te sirve de consuelo
tirar todo por la ventana,
ya mismo, desde mi cama,
tiro todo lo vivido,
queda todo por perdido
sin mas ni menos que eso,
y de mi cuerpo
seguiràs preso,
¡de eso no tengo dudas!
¿O acaso lo disimulas
cuando me miras perplejo,
parada frente al espejo?
¡No lo puedes evitar!
Entonces
vuelvo a empezar.
Tu mirada me cautiva,
tus manos, aunque ya frìas,
me sostienen en la espera
de que decidas, mi cielo,
quien es quien te da desvelo
si es ella o si soy yo.
¡Por Dios!
Decide, mi amor.
¿No ves que me estoy muriendo?
Que mis caderas esperan,
Tus caricias, tu vibrar,
y volverte a encarcelar
en mi alcoba,
aquì, en mi lecho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario