Te acunaré en brazos de luna,
ese será nuestro secreto.
Iré cada noche hasta tu cuna
y te besaré, mi nieto.
Tendrás algo de mí
en tus ojos o en tu pelo.
Tendré algo de ti
en mis noches de desvelo.
Cuando llores por las noches
correré al encuentro
para que pueda mecerte
en tu cuna y en silencio.
Un hilo de seda
nos unirá: abuela… nieto.
Y entre tormentas y oleajes
ese hilo estará tenso.
Pero el amor no permite
que ese lazo se disuelva
porque las penas son penas
y el amor las deja afuera.
Te llevaré cada noche
miel, caricias y un cuento
de nietos felices… sonrientes
y de abuelos en sosiego.
Y un coro de ángeles que entonen
conmigo estos simples versos
mientras mis brazos de luna
te acunan… mi deseado nieto.
Abuela Gra, octubre 2008
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Me parecen dictados desde lo mas profundo del alma
ResponderEliminarAndres
Que gusto me dà que estos versos sean los mas visitados, porque como decìs vos, Andres, "estàn dictados desde lo mas profundo del alma". Estos versos los escribì cuando me enterè que la bella Delfina ya estaba en camino. Ya tiene 3 añitos.
ResponderEliminarGracias a todos los que visitan mi blog, y en especial estos versos.
Desde mi amada Argentina
Graciela